sábado, 5 de febrero de 2011

¡Tomando decisiones.. informes aqui


Una muy buena amiga mía está tomando por estos días una decisión muy importante. Y si bien el tema central es laboral, en el fondo se trata de una conversación con  su propia vida e involucra de una parte valores como lealtad, honestidad y apoyo a otros, al otro lado de la balanza se encuentran  la propia felicidad, tranquilidad y coherencia con sus propios pensamientos.

¿Cuantos de nosotros nos hemos levantando en algún momento de nuestras vidas sintiendo que estamos, como el slogan de una reconocida entidad financiera colombiana, en el lugar equivocado?.

No  disfrutamos al 100% nuestro trabajo porque no es valorado ni reconocido, pero sentimos que debemos seguir ahí porque tenemos una responsabilidades a las cuales responder, un contrato al cual ser fiel y, admitámoslo, la comodidad de un puesto con contrato a término indefinido, prestaciones laborales y sueldito fijo cada quincena es un aliciente suficiente para aguantar aquello con lo que no estamos de acuerdo. ¡Con esta crisis, mejor estar asegurado!

O no sentimos que esa relación que llevamos nos llene completamente porque no es  lo que esperamos, la pasamos bien pero... siempre falta el centavo pa´l peso, pero ahí estamos porque el temor a una soledad no deseada nos detiene a pararnos por nuestros propios deseos y buscar exactamente lo que queremos para nuestra vida.

¿No estaremos viendo solamente una de las caras de la moneda a la hora de analizar lo que nos pasa o lo que generamos en nuestras vidas?

Dice Antohony Robins, en su libro Poder sin Límites que "en el mundo no hay nada que tenga un significado inherente. Nuestro parecer sobre las cosas y sobre lo que hacemos en la vida depende de nuestra percepción de ello. La mala suerte es un punto de vista. La jaqueca de usted es la fortuna del vendedor de aspirinas... Decimos que tal cosa ocurrió y que "tal" significa "cual", cuando en reallidad los posibles modos de interpretar cualquier experiencia son infinitos.. si percibimos algo como una obligación, tal es el mensaje que enviamos a nuestro cerebro.. si cambiamos nuestro marco de referencia para contemplar la misma situación desde otro punto de vista cambiaremos nuestra manera de reaccionar ante la vida"

En otras palabras, y recordemos quienes hemos ejercido o ejercen la labor de periodistas, esa regla de oro de buscar siempre todas las versiones de un mismo hecho para acercarnos lo más posible a una versión "objetiva" del asunto. En la vida no se si haya una versión "objetiva", pero si hay varias versiones de lo mismo y depende de cada uno de nosotros cual queremos adoptar como nuestra forma de vida.

Una versión puede ser ver las cosas que nos pasan como la obligación de vivirlas porque esa fue la vida que nos "tocó" y otra  archivar en el cajón del mueble más viejito de la casa mas alejada y abandonada aquellas decisiones de  estar con alguien o hacer algo solo por "lucir bien" y de esa forma despertar cada mañana con la ilusión de hacer aquello que yo elegí hacer, y que seguramente me va a costar un poco más de esfuerzo, es probable que al comienzo sí, pero finalmente las cosas toman su rumbo y lo más importante es que toman el rumbo que nosotros queríamos que tomarán.

La vida es una. Y mi vida no es de mi jefe, ni de mi esposo, ni de mis hijos, es mía y si yo no decido vivirla a plenitud nadie más lo hará. Y lo más importante es que si tomo esa decisión y me convenzo que la felicidad está en el camino y no en el destino, podré irrigar eso a quienes están a mi alrededor, porque ojo, no estoy apoyando versiones egocentricas de "yo, el único importante sobre la tierra", porque hay quienes se han tomado muy a pecho esto y he conocido algunos personajes....   

Mira  cualquier objeto una vez, cierra los ojos y  muévete un poco hacia cualquier lado. Abre tus ojos nuevamente y vuélvelo a mirar... ¿ verdad que algo cambió?: Tu propiciaste el cambio de percepción y decide cual lado te gusta más.